martes, 28 de diciembre de 2010

Educación y medio rural

No puedo, ni quiero olvidar mi relación con el medio rural y desde siempre, siento verdadera  preocupación por la educación en las las zonas rurales, esto me ha llevado a fijarme en el problema que supone la falta de formación para  muchas personas que viven en este medio (algunas las conozco personalmente).

 La despoblación que ha venido sufriendo desde hace años, la emigración, el desplazamiento de los jóvenes a los núcleos urbanos para trabajar, la longevidad, pocos adultos dedicados a trabajar en las explotaciones agrarias y ganaderas y un número de nacimientos casi nulo, está llevando en los últimos años a una situación difícil y que lo que habíamos avanzado con los planes de ayuda europeos, no está dando los frutos necesarios para que sea atractiva la vida en estas zonas. Seguramente la formación podría ayudar a hacer un poco más fácil la vida diaria.


 Hay, a mi entender dos colectivos, que necesitan una formación continuada que les permita o les ayude a tener una mejor calidad de vida:
Por un lado, las personas mayores, la mayoría carecen de  estudios básicos y se encuentran ahora en un mundo donde con los conocimientos que tienen, ni siquiera pueden rellenar un impreso por fácil que sea y eso supone una dependencia continua. Claro que los que son muy mayores ya sería casi imposible que en determinados temas pudieran ponerse al día, pero siempre hay cosas que se les podría enseñar.

Por otro están los adultos y algunos jóvenes que trababajan en explotaciones que están modernizadas
( las que no lo están, o han sucumbido o lo harán pronto) y éstos necesitarían formarse continuamente, sí que hay planes de formación, pero la mayoría de veces tienen que desplazarse a grandes distancias para la realización de cursos, y tampoco la oferta es tanta, de hecho hay ayuntamientos que durante todo el año no realizan ningún curso  y si hacen algo en este sentido,  está relacionado con la formación ocupacional. 

Es necesario, que estos colectivos tengan  facilidad y ayuda en lo referente a educación y formación continuada, que haya más implicación a nivel local, adecuar la formación a cada colectivo, lo cual significa tener formadores adecuados, cosa que la mayoría de veces no ocurre.

Qué bueno sería que estas personas no tuviesen tanta  dependencia, (debido a la escasa formación) bien familiar o de personas ajenas, a las cuales recurren  para poder realizar gestiones elementales, muchas veces con el consiguiente dispendio económico.

No olvidemos que sin el campo difícilmente las ciudades puedan sobrevivir, que lo necesitamos y además lo  disfrutamos.



Porían las administraciones preocuparse un poco más por estos temas, además de hacerlo por la producción y los impuestos?

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